El «Cangrejo rojo americano», Procambarus clarkii (Girard, 1852), es una especie de artrópodo perteneciente a la familia de los Cambaridae. Originario del SE de Estados Unidos y del NE de México, ha sido introducido en Europa, Asia y África, e incluso en archipiélagos como Japón o Hawaii, quedando sólo libres de él Australia y la Antártida. La primera introducción en la Península Ibérica se realizó en Badajoz en 1973, con 480 ejemplares procedentes de Estados Unidos para realizar un ensayo de aclimatación. Tras resultar exitoso el experimento, en 1974 se establece el primer vivero de cría en las marismas del Bajo Guadalquivir, con fines comerciales. Posteriormente se suelta por los ríos de la zona para su comercio, consumo local y para ser utilizado como cebo. La especie se dispersó muy rápidamente, apareciendo en pocos años en zonas tan distantes como la Albufera de Valencia (1978), o el Delta del Ebro y la provincia de Zamora (1979). La expansión se ha debido, además de por las sueltas ilegales, a su capacidad de dispersión por las cuencas, llegando a recorrer hasta 3 km diarios. Sólo los tramos altos de los ríos de Castilla y León, País Vasco, La Rioja y de las provincias del N, en los que las aguas son más frías, se encuentran libres de esta especie. En Galicia destaca su abundancia en los embalses de Sabón, As Forcadas, Cecebre, A Fervenza, Belesar y Os Peares.
![Cecebre (Cambre) - 19/09/2019 - LG G4 Procambarus clarkii](https://lh3.googleusercontent.com/NhPnAAL1ish5N9pKeICmdYgvFljsDr6snnSG_qyelbQp6BLH7ZHzlmGeRJTr8MpiHQPKZJ_OkadBCRnTJ14haHqUpwSEFCnq-rpdFmKTTzKVJQ6wPcotKSQ0QrtDNf1ZH85uYTGfP9bfswtr_4D2s4Deg6PD19fx73yGkL7qwkLv7vFcBlU9m1h6Bcuqez9RLrOqyeWW6mzhACt7_Hc1JzbxTvtkcxfqTOt4WTfyYgCtOgT4J1swKA3A0uGz23uy0gbspSDNOZtqvnIFOof0R6JphB7r3WlZxXx3lGsLsmvtPN2N32-32sfGqNjMpFazv98N6ARJRtD67m02-4K2WiBvlLSMCcKQNhSoNXO-kNYAh16rFzRli9LcVc8dFCLw9EHF2OJ2GvVJ2SWdg2XOPj49PGcrtJXYGK4czdB6wqjypWWX25QWYubnPS1G9lp5J82odRiyEX4CdJAtuw1JM-roFnNM_h3t_67aAqDGk1ycfm90XOEchhOOErbtLephH6tlCXLayTvKg8eKqtLJ8UkbisTQm4GS7WYrgSpAdbTHh9OBIEkSBsPxRWuZEVt2c31I_z6EJSEhyUpDzDbCUQHXi4m8Z6YcbszK0oyQtrLB22mAOz5o3TZGd-9ykrQ9tvqhIIMOGv4MDxJZav_DoH7je7-eEt5buJx0V0ahFFrML4H2RPZtG84QvVYe3S5dq1CA8U3L7qM2bZkiEHyMaa2NttnVfW7IgpBq5l_HoKQusvRQ)
Entre los muchos problemas que ha causado la introducción de esta especie en los ecosistemas acuáticos, destaca su contribución a la desaparición -hasta su casi extinción- de nuestro cangrejo de río autóctono Austropotamobius pallipes (Lereboullet, 1858). Una causa es la afanomicosis, un hongo parásito del que es portador este cangrejo americano y que afecta mortalmente a la especie nativa, pero también por una mayor capacidad para soportar condiciones adversas del medio, como la escasez de oxígeno disuelto en el agua o elevadas temperaturas, por una madurez sexual más precoz y una mayor capacidad reproductiva y por una capacidad de dispersión natural muy elevada. Sigue leyendo →